Por IMFBlog
En las últimas tres décadas, el precio de maquinaria y equipos ha caído de forma pronunciada en comparación con los precios en general. El aumento del comercio y las mejoras tecnológicas generalizadas han hecho más eficiente la producción de los bienes de capital, y eso ha ayudado a países de todo el mundo a incrementar la inversión real y mejorar los niveles de vida.
Sin embargo, las tensiones comerciales y el lento crecimiento de la productividad podrían ralentizar el descenso del precio relativo de maquinaria y equipos, lo que frenaría el crecimiento de la inversión a escala mundial.
Nuestro gráfico de la semana, extraídos de la edición de abril de Perspectivas de la economía mundial , muestra que, desde 1990, el precio de maquinaria y equipos en comparación con el precio de los bienes de consumo disminuyó alrededor de un 40% en las economías de mercados emergentes y en desarrollo.
En las economías avanzadas, la caída del precio fue incluso mayor: aproximadamente un 60%. Estos descensos son drásticos si se comparan con los precios de otros tipos de activos de capital, como viviendas y estructuras comerciales, que siguieron más de cerca el nivel de precios del consumo.
Según los estudios del FMI, el comercio internacional ha sido el principal factor detrás de la caída de los precios de maquinaria y equipos en relación con los precios de bienes de consumo. Y el descenso del precio de los bienes de capital, a su vez, dio un impulso considerable a la inversión real.
El análisis del FMI pone de manifiesto que, en una economía de mercado emergente y en desarrollo promedio, alrededor de un tercio del aumento de la tasa de inversión real en maquinaria y equipos en las últimas tres décadas es atribuible al abaratamiento de los bienes de capital en comparación con los de consumo. El resto se debe a políticas macroeconómicas más sólidas y otros factores.
En todas las economías, evitar medidas proteccionistas y reactivar la liberalización del comercio contribuiría a mantener el ritmo de descenso del precio relativo de los bienes de capital. Además, daría un impulso al deslucido crecimiento de la inversión en las economías avanzadas y contribuiría a la profundización del capital, tan necesaria aún en los países en desarrollo. Fomentar la innovación en el sector de producción de bienes de capital, tanto en economías avanzadas como en economías de mercados emergentes y en desarrollo, también es fundamental.